La Fiscalía de Azuay inició un expediente administrativo para investigar la muerte de cuatro ciudadanos chinos en el proyecto hidroeléctrico Sopladora, ocurrido el martes pasado. Ellos estaban ampliando el pozo de carga con el uso de explosivos. Con el expediente se busca recolectar toda la información para determinar si hubo un accidente de trabajo o no. Si se comprueba esa hipótesis el caso termina, pero si hay indicios de que no fue así se abrirá una etapa de indagación, dijo el fiscal de Azuay, Lizandro Martínez. El fiscal encargado del caso, Marcelo Molina, dispuso ayer que a través de uno de los médicos forenses de la Fiscalía se obtengan muestras de los restos para obtener los perfiles genéticos. Martínez dijo que es necesario realizar pericias como estudios de ADN para tratar de identificarlos. Los restos permanecen en la morgue del Hospital Vicente Corral Moscoso de la capital azuaya. Según Martínez, también esperan la llegada de los familiares de los fallecidos para realizar otro tipo de identificaciones y proceder con la entrega de los cuerpos. En el expediente se recopilarán las versiones de las personas vinculadas con la construcción del proyecto. Fuente: El Comercio.