Hasta fines de este año, al menos tres hidroeléctricas públicas se pondrán a disposición del capital privado para atraer liquidez. Sopladora, Manduriacu y Ocaña están dentro de esta lista, según el presidente Rafael Correa. En este contexto, la concesión es la figura que el Régimen analiza para que se hagan cargo empresas interesadas en las hidroeléctricas. Esto lo dijo el ministro de Sectores Estratégicos, Rafael Poveda, ayer. “El fin último no es tener una hidroeléctrica, sino asegurar la energía para el país”, aseguró el funcionario al indicar que la soberanía energética del país está garantizada en esta operación. “Seguramente será la figura de concesión. En la estructura legal de Ecuador, cuando un privado da un servicio público como la generación eléctrica lo hace bajo la modalidad de un contrato de concesión”, puntualizó.
Fuente: El Comercio (http://bit.ly/GWnQPJ).