El Gobierno abrió un diálogo directo con las bases del movimiento indígena, en momentos que su cúpula lidera manifestaciones contra la explotación petrolera en el Yasuní. El escenario fue el estadio olímpico de Riobamba, que ayer lució abarrotado de miembros de comunidades de Cotopaxi, Chimborazo, Tungurahua y Bolívar. Allí, el presidente Rafael Correa, junto a sus ministros de Agricultura, Desarrollo Social, Inclusión Económica y Gestión de la Política, oyeron los planteamientos de los dirigentes, en una cita llamada 'Diálogo del buen vivir', Modernizar el sistema de riego, respetar la justicia indígena y garantizar la educación intercultural fueron, en esencia, los prinicipales pedidos de los dirigentes de las bases indígenas. Después de oír las propuestas, Correa explicó las programas a favor del movimiento indígena, descalificó a los dirigentes de la Conaie y explicó por qué desea explotar el crudo del Yasuní. Enumeró las principales obras en vialidad, educación, salud y el campo que ha ejecutado, con las que se ha reducido la pobreza, especialmente en la población indígena. Después de lamentar no ser indígena, dijo que su gobierno quiere a la Ecuarunari (filial de la Sierra de la Conaie), pero custionó la actuación de sus dirigentes y legisladores. Fuente: El Comercio.